NUESTROS INICIOS
En diciembre del año 1969, un grupo de padres preocupados por la educación de sus hijos, se sintieron animados por la invitación que hiciera el Concilio Vaticano ll, exhortando a los laicos a evangelizar la cultura, y reconociendo el derecho y el deber de los padres como los primeros educadores de sus hijos. Deciden entonces fundar la Asociación San Pablo con la finalidad de… “crear, orientar y dirigir establecimientos educativos, para que en ellos se formen nuestros hijos en la doctrina católica e instruyan en las ciencias, artes y técnicas humanas, respetando la prioridad del bien común y observando las tradiciones argentinas…”.Inician así el primer colegio católico de Salta dirigido por laicos.
NUESTRA MISIÓN EDUCATIVA
Nuestro proyecto concibe a la Educación, como el camino necesario para introducir a la persona en el conocimiento de sí mismo y de su entorno como hijo de Dios, desarrollando sus potencialidades e interpretando la realidad de manera crítica, creativa y positiva; atribuyendo un significado a todo lo que conoce y descubriendo el sentido de su propia existencia. La educación es posible solo en comunidad, en compañía de otros, y prepara al niño y al joven para ser verdaderos protagonistas de la cultura, responsables, comprometidos y testigos del Amor de Dios.
FUNDAMENTOS
Nuestro proyecto Educativo, está basado en los valores evangélicos transmitidos y vividos por la Iglesia Católica y propone una pedagogía que busque construir una comunidad educativa sustentada en la concepción de amor que nos propone Jesucristo, que plenifica al hombre y lo mueve al encuentro con el otro, creando vínculos con otras realidades y compartiendo un modo de vivir en comunidad, basado en el respeto, la solidaridad la libertad y, la responsabilidad.
Partimos de la idea de persona revelada en los Evangelios “El hombre es imagen y semejanza de Dios…”, concebido como un ser singular, libre, en relación y trascendente. En él podemos descubrir una realidad biológica, afectiva, racional y psíquica, ambiental y comunitaria, y una realidad trascendente que reconoce un origen, un destino y la existencia de un más allá. Éste hombre, además, se encuentra en una total interdependencia con el universo que lo rodea y de allí que también sea nuestro objetivo crear conciencia de la importancia de valorarlo, respetarlo y cuidarlo.
FINES INSTITUCIONALES
Promover la formación integral de la persona y de toda la comunidad educativa, para que cada uno de sus miembros, pueda cumplir su misión y desarrollar su proyecto de vida con sentido de trascendencia, responsabilidad y compromiso solidario.
La formación integral del alumno que propone nuestro PEI, tiene como objetivos y se desarrolla:
Contemplando su singularidad
Diagnosticar su forma de aprender (visual,-auditiva-propioceptiva).
Desarrollar sus capacidades teniendo en cuenta sus habilidades(aptitud interrogativa, capacidad de contextualizar y globalizar, aptitud para plantease situaciones y buscar soluciones, capacidad para proponer nuevas ideas, desarrollar un pensamiento científico riguroso, capacidad de recabar información de fuentes dispares, comprender, evaluar con objetividad y reunirla de manera que adquiera sentido y pueda ser interpretada por todos. Capacidad para usar el lenguaje oral, escrito, corporal y artístico.
Desarrollar su creatividad.
Formar Conciencia y Afectividad responsable: (Educar en los valores evangélicos, ayudar a conocer y amar la verdad, proponer el amor a una cultura verdaderamente humanizadora que condiga con la dignidad del hombre, despertar el auténtico amor al trabajo como algo que dignifica a la persona. Descubrir el concepto y el sentido de la ética en todo el quehacer humano: como ciudadano, como profesional, como persona al servicio de los demás y en especial de los más humildes).
Educar la inteligencia emocional, desarrollando la capacidad de escucha, de reflexión y de diálogo.
Desarrollar hábitos positivos de cuidado personal.
Teniendo en cuenta su Libertad
Dar oportunidades para aprender a elegir, explorar, investigar, recono-Ciendo que nuestra vida, está en nuestras decisiones, por ellas podemos realizar nuestro proyecto, o frustrarnos, de allí la importancia de la responsabilidad como dimensión fundamental de nuestra libertad.
Formar el criterio y fomentar la visión crítica y el juicio individual.
Contemplando su dimensión interpersonal
Concientizar a cerca de que el proceso de crecimiento personal no es una actividad individual sino que está asociado a un compromiso solidario. La Personalidad se construye en el encuentro con el otro, afirmándose y aprendiendo de todos y con todos, incentivando la colaboración generosa, la amistad, el compañerismo, la empatía, el liderazgo, la confianza.
Inculcar el respeto por las opiniones divergentes, entendiendo que formamos parte de una sociedad pluralista y somos responsables de construir una convivencia armónica.
Fortalecer los vínculos con la familia en una misión educativa conjunta, fortaleciendo simultáneamente los vínculos entre todos los miembros de la comunidad educativa.
Teniendo en cuenta su trascendencia
Procurar un clima adecuado para la vivencia de la Fe, asumiendo a la Persona de Cristo como modelo y sentido de nuestras vidas.
Profundizar el conocimiento de la doctrina cristiana comprometida, en-carnada y arraigada en la presencia de Cristo, como una propuesta de Fe hecha experiencia vivificadora y motivadora, que mueva a la persona a dar y a darse ,en una respuesta consciente y comprometida frente a la realidad.
Introducir al alumno en el estudio de las Religiones comparadas, valoran- do su Fe y respetando y comprendiendo las demás creencias.
Ayudar a descubrir la armonía entre la Razón y la Fe (Doctrina Social de la Iglesia) ampliando el concepto de Razón, descubriendo que lo razonable no es lo que coincide con un concepto predeterminado, sino lo que se corresponde con el Ser, con la realidad y con todos los aspectos de la vida.